El camino al infierno…

El camino al infierno…

El chiste es que la Unión Europea se dio cuenta de que los malvados programadores de internet guardan una pequeña cantidad de información en lo que solía llamarse galletas o cookies.

Estas galletas se usan para un usuario pueda saltar de una pagina a otra en el mismo sitio sin necesidad de volver a teclear toda la información de su cuenta.

Cualquiera con la mínima educación tecnológica sabe que TODOS los sitios de internet guardan las famosas cookies.

Los políticos de Bruselas, que es ahí donde deciden el futuro de toda Europa, queriendo que los usuarios no fueran tomados por sorpresa, pasaron una ley para que al entrar a un sitio, sean informados de las famosas cookies y le pidan su autorización.

…está empedrado de buenas intenciones.

Esta autorización que los usuarios tienen que dar al sitio, viene en todos los colores, posiciones y fuentes, el usuario tiene que dar clic en donde dice autorizo.

Para asegurarnos de que nuestras páginas puedan ser usadas en Europa, ponemos la misma solicitud de autorización aunque solo las usen nuestros paisanos.

La primera vez que nos piden autorización, leemos de que se trata. La segunda vez también lo mismo que la tercera. Para la décima quinta página que nos pide autorización para las galletes pues no leemos lada, simplemente damos clic en el botón de autorización.

Si el texto nos pidiera autorización para que donemos un riñón, simplemente daremos clic en autorizar y… listo.

Vivir en mi querida patria implica una batalla diaria con los burócratas que día a día inventan reglas para hacer nuestra vida más complicada.

Es un poco un respiro saber que los burócratas Aztecas y los Yaquis mexicanos no son los únicos jodiéndonos la vida, hasta los Sajones y los Galos europeos hacen lo suyo.